Prurito: síntomas, causas y tratamiento

Es habitual en climas muy secos o en determinadas estaciones del año que algunas personas sientan de manera ocasional y por corto tiempo un fuerte picor u hormigueo en distintas partes de su cuerpo. Se trata del tipo de picazón que conlleva la imperiosa necesidad de rascarse continuamente el área afectada para encontrar alivio. Estas personas están sufriendo el denominado prurito de la piel. A veces, la sensación que produce es puntual, sin embargo, en ocasiones, se extiende en el tiempo, por lo que es necesario saber hacerle frente con el fin de aliviar el picor de piel cuanto antes.

¿Qué es el prurito en la piel?

Es el nombre científico que recibe la incómoda sensación de hormigueo o picazón en el cuerpo que puede sentirse sobre una parte concreta de la piel o de manera genérica en todo el cuerpo. Se trata de un tipo de comezón que induce a rascarse sin cesar para tratar de encontrar alivio.

Normalmente, la razón por la que aparece es porque la piel está seca. Sin embargo, existen muchos otros motivos por los que aparece el prurito. Dependiendo de la causa, la dermis puede mostrarse con un aspecto normal, áspero y enrojecido; a veces incluso con áreas descamadas o agrietadas; y ocasionalmente con manchas, bultos y ampollas. En el caso de que alguien se rasque de una forma continua puede provocar que la zona sangre, se infecte o, incluso, se engrose. Por ello, lo más recomendable es evitarlo.

Causas del prurito en la piel

Son muchas las causas por las que se produce el prurito. Entre las causas más destacadas se encuentran las siguientes:

• Problemas en la piel: algunas de las causas más comunes del prurito son los problemas de la piel, como es la psoriasis, la piel seca, las picaduras de insectos, las cicatrices, las quemaduras o la urticaria.
• Problemas internos del organismo: las razones por las que tiene lugar el prurito, a veces, no tienen relación con el hecho de que la piel, de forma externa, sufra algunas de las causas mencionadas en el punto anterior, sino que están ligadas a razones internas que puede tener el organismo, como la anemia o la diabetes.
• Reacciones alérgicas o irritación: las sustancias químicas presentes en infinidad de productos, la lana o los jabones pueden provocar, en ocasiones, que la piel se irrite. Por ello, aparece un sarpullido y su posterior picazón. También es posible que esta situación sea provocada por un medicamento o algunas plantas.
• Otras causas del prurito: además de las anteriores, el prurito puede ser provocado, por ejemplo, por un trastorno obsesivo-compulsivo que impide a la persona dejarse de rascar en un punto determinado. Otros motivos son los nervios pinzados, que también harían que apareciese la sensación de picazón, el envejecimiento natural de la piel y los cambios físicos y hormonales que se producen durante el embarazo.

Síntomas del prurito en la piel

El hecho de que se sienta picazón en la piel y se quiera actuar ante ello, rascándose, provoca algunos síntomas sobre la dermis, ya sea en un brazo, en el cuero cabelludo, en una pierna o en cualquier otro lugar del cuerpo. Estos son los siguientes:

• Marcas de rascado.
• Manchas, bultos o ampollas.
• Enrojecimiento.
• Piel agrietada y seca.
• Manchas ásperas y escamosas.

En ocasiones, la sensación de picazón, es decir, el prurito, puede durar un periodo largo de tiempo y ser intenso. Cuanto más se rasque la zona, mayor será la picazón. Romper este ciclo de picazón-rascado puede ser difícil, motivo por el que hay que buscar cuanto antes una solución al problema.

Tipos de prurito más comunes

Los tipos de prurito más comunes son:

Prurito acuagénico

Tiene lugar cuando la piel se pone en contacto con el agua y esta causa reacción, independientemente de su temperatura.

Prurito genital

El prurito genital puede aparecer por alguna infección del organismo, por irritación, por reacciones alérgicas o por el roce continuo con la ropa interior.

Prurito generalizado

El prurito generalizado es el que aparece a lo largo de la piel, pudiendo darse en cualquier parte del cuerpo.

Tratamiento del prurito en la piel

Existen muchas formas que pueden ayudar a aliviar los síntomas del prurito en la piel. Estos hábitos y tratamientos sencillos pueden contribuir también a prevenir el empeoramiento de alguno de sus síntomas y permiten que la dermis se muestre más calmada.

Evitar rascarse

Rascarse constituye la reacción más habitual para enfrentarse a la molesta sensación de picazón, pero es necesario evitarla en la medida de lo posible. Una fricción del área afectada puede aliviar momentáneamente los síntomas, pero puede contribuir a empeorar el enrojecimiento y provocar arañazos y heridas que podrían derivar en complicaciones y prolongar la sensación de picazón.

Usar prendas livianas y transpirables

Mantener la frescura y humedad naturales de la piel es fundamental para que se mantenga sana y flexible. La fricción de la ropa y el calor excesivo pueden provocar o empeorar el enrojecimiento y otras afecciones de la piel que producen picazón. Es importante utilizar prendas livianas preferiblemente de tejidos naturales para posibilitar la transpiración y la temperatura adecuada de la piel.

Cambiar los hábitos de baño

La higiene de la piel es sumamente importante para su cuidado, pero el exceso no es recomendable. Dependiendo del tipo de piel, del agua, de la zona en la que se encuentre y de otras variables, bañarse en exceso puede ser contraproducente y puede contribuir a resecar la piel. Una posibilidad es tomar baños o duchas cortas y tibias, utilizando jabones naturales sin aditivos que ayuden a prevenir afecciones cutáneas.

Mantener la piel hidratada y protegida

Mantener la piel hidratada de manera constante con el uso de una buena crema puede resultar fundamental para prevenir la sequedad extrema y contribuir a evitar la aparición del incómodo prurito. Aplicada después del baño puede servir para retener la humedad de la piel por más tiempo.

Cuando la comezón ha aparecido, otra opción es usar productos como Calma Hidrogel de Halibut, que ayuden a aliviar la sensación de picor. Este producto es capaz de aliviar la sensación de picor en pieles irritadas, secas o sensibles en solo un minuto y de forma duradera. Tiene un triple efecto, ya que protege la dermis, refuerza la barrera cutánea y disminuye la sensación de picor. Su aplicación debe realizarse siempre de manera suave y con movimientos envolventes sobre el área afectada, evitando al máximo la fricción excesiva para no lesionar la piel.

Aplicar una compresa fría

Las compresas frías, aplicadas sobre las zonas afectadas por el prurito en la piel, contribuyen a calmar algunos de los síntomas más molestos. Puede utilizarse una compresa mojada en agua fría o en una infusión de manzanilla. La manzanilla contiene sustancias de acción antiinflamatoria que pueden ayudar a aliviar o calmar la comezón de las áreas enrojecidas. Es importante colocar la compresa con suavidad y presionar delicadamente, teniendo cuidado de no rascar ni frotar el área dañada para no empeorar los síntomas o aumentar la irritación.

Evitar ambientes excesivamente cálidos y húmedos

La sequedad de la piel y otras afecciones cutáneas se ven afectadas por el exceso de calor y humedad. Para prevenir la aparición del prurito en el cuerpo y contribuir a su desaparición es conveniente no exponerse de manera reiterada a espacios o lugares excesivamente cálidos o húmedos.

Siguiendo alguna de estas sencillas pautas podrás contribuir a evitar ese molesto picor y disfrutar del calor del verano sin molestias.